El secreto de la supervivencia de las algas se transmite a la piel mientras disfruta de una deliciosa experiencia sensorial. Brillando con reflejos iridiscentes, esta textura negra increíblemente profunda se funde de manera transparente en la piel, después de la aplicación, revelando su resplandor y brillo sedoso.
Llena de los beneficios anti-envejecimiento de Le Soin Noir, la piel está generosamente nutrida y llena de vida. Sus fuerzas vitales parecen mejor conservadas. Firme, tersa y más confortable, la piel florece día tras día, irradiando un nuevo brillo juvenil.

Un fascinante color negro profundo del que nace la luz: una crema prodigiosa dotada del extraordinario regalo de supervivencia de Le Soin Noir Alga
Rico en propiedades conservantes con increíbles beneficios que desafían el envejecimiento, ayuda a estimular el equilibrio de la piel, revitalizar sus defensas naturales y asegurar una preservación activa.
Visiblemente reafirmada, tersa y más confortable, la piel parece florecer día tras día, irradiando un nuevo brillo juvenil.

Durante miles de años, las algas han demostrado tener unas capacidades excepcionales para desarrollar y prosperar en las condiciones más extremas alrededor del mundo.
Los laboratorios Givenchy han explorado esta prodigiosa fuerza de vida durante muchos años y han logrado revelar los secretos de su fuerza, recurriendo a la capacidad activa original de las algas. Los investigadores han formulado un complejo con una vitalidad excepcional al combinarlas con ingredientes extraídos en el momento preciso: cuando las algas despiertan, su poder de regeneración está en su punto álgido.
Le Soin Noir, rico en algas y con propiedades revitalizantes, es capaz de ofrecer increíbles beneficios antienvejecimiento. Su savia negra ayuda a estimular el equilibrio de la piel, mientras que sus ingredientes ayudan a revitalizar sus defensas naturales y a asegurar una protección activa*. Parece que toda la fuerza vital de la piel se conserva y revitaliza.

•Tome una cantidad de crema negra del tamaño de una perla y caliéntela con la punta de los dedos.

•Aplicar en todo el rostro y cuello con movimientos suaves.

•Realice leves puntos de presión sobre la cara.

•Realizar un masaje suavizante y envolvente en todo el rostro.