Con doce meses a favor, es momento de formular nuestras resoluciones de belleza. Sí, tu piel también merece un apartado especial en la lista mágica de propósitos para el nuevo año, así que te recordamos los que no pueden faltar. ¡Un rostro radiante será la mejor recompensa!
Ahorrar, ejercitarte, pasar menos tiempo en el teléfono, viajar, dedicar más tiempo a tu bienestar…Cuando asoma un nuevo año, en un gesto colectivo, el mundo comienza a formular deseos, a hacer planes para los 365 siguientes. Tú y yo no somos la excepción. Con el entusiasmo de un niño ansioso por escribir en la primera hoja de su cuaderno nuevo, tomamos nuestras relucientes agendas y lápiz en mano comenzamos a soñar, a formular propósitos. No es la primera vez que lo hacemos y tampoco es la primera vez que el entusiasmo se diluye en el camino, dejando atrás esos objetivos. Pero claro, hemos aprendido mucho y hemos dedicado tiempo a estudiar cómo construir hábitos, así que 2024 será diferente, al menos eso me dice una optimista vocecita interna. Con esa actitud culminé mi lista, asumo que cubre todas las áreas importantes en mi vida. Y tú, ¿cómo vas? Antes que termines tu lista, repásala de nuevo, tengo una curiosidad… ¿Incluiste en tus propósitos, cuidar más y mejor de tu piel? Espero que así sea, pero si por alguna razón lo obviaste, estás a tiempo de añadir las siguientes 12 resoluciones beauty que te prometo, si cumples al pie de la letra, te harán presumir la piel más hermosa y radiante que puedas imaginar. ¡A tomar nota!
1. HAZ UN COMPROMISO CON TU PIEL. Olvídate de dormir cinco minutos más cuando suena el despertador o de justificarte con el cansancio de la jornada para acostarte con maquillaje. Nada, absolutamente nada, debe impedir que realices tu rutina beauty por la mañana y por la noche. Como para todas tus actividades, dedica un tiempo específico para realizarla, si es posible, designa un horario. Recuerda que la consistencia es la clave para ver resultados en tu piel y este es el hábito más importante para un rostro radiante.
2. NO TE COMPLIQUES. La rutina de belleza no tiene que ser compleja. Apégate a los tres pasos esenciales: limpiar, tonificar e hidratar. Ninguno debe ser omitido y para cumplirlos no necesitas un arsenal de productos. Limpiador, tónico, sérum, contorno de ojos, hidratante y protector solar (en ese orden de aplicación) son los esenciales en la mañana, repitiendo el proceso en la noche, a excepción del FPS.
3. DESMAQUÍLLATE BIEN. Parece inofensivo pero acostarse con maquillaje puede causar estragos. Como ya sabemos, es durante la noche que la piel tiene la oportunidad de regenerarse, pero si está sucia sucede todo lo contrario, puede acelerarse el proceso de envejecimiento, se promueven las arrugas, los puntos negros y la piel pierde luminosidad y frescura. Al despertar encontrarás tu rostro apagado y sin vida. Utilizar una buena limpiadora, adecuada a tus necesidades y tipo de piel, es obligatorio. Solo asegúrate de remover todo rastro de maquillaje.
4. APLICA PRODUCTOS ADECUADOS PARA TU TIPO DE PIEL. En términos dermatológicos, existen cuatro tipos de piel: normal, seca, mixta y grasa. A eso hay que agregar la edad; condiciones y las necesidades específicas de cada rostro. Es en base a lo anterior que debes elegir el tratamiento adecuado para ti, no compres por impulso, por recomendación de una amiga o porque es la crema del momento. Pide asesoría y elige cuidadosamente cada producto acorde a lo que requieres realmente.
5. NUNCA OLVIDES EL PROTECTOR SOLAR. Este es el imperdible para todos, sin importar la edad. Su uso diario nos protege del fotoenvejecimiento, hiperpigmentación, irritaciones, manchas y cáncer de piel. Aplica al finalizar la rutina de belleza matutina, sin importar si trabajas en una oficina o sales con frecuencia. Recuerda que además de los rayos solares, permanecemos expuestos a la luz que emiten las computadoras, celulares, pantallas y lámparas, que también influyen en el envejecimiento cutáneo, por lo que el uso de FPS es obligatorio.
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6. COMIENZA UNA RUTINA ANTI-EDAD. A finales de los 20, cuando los primeros signos de la edad se manifiestan, es el momento perfecto para introducir tratamientos antiage. Recuerda que la prevención es la clave así que no esperes a que las arrugas profundas se marquen alrededor de los ojos para empezar un plan de ataque. En cuanto antes comiences, mejor. ¿Qué productos debes usar? Comienza por pedir asesoría y elegir productos que en sus fórmulas contengan vitamina C, que ayuda a producir colágeno, péptidos y ceramidas, para ayudar con la hidratación y retinol, que promueve la renovación celular y disminuye la aparición de arrugas y dilatación de los poros, entre otros.
7. POR FAVOR, USA CREMA DE NOCHE. Aunque es común preguntarse si la crema de noche es realmente necesaria y si podemos reemplazarla con un hidratante normal de día, la respuesta es un rotundo sí. El skincare nocturno ofrece toda la hidratación y los beneficios de las cremas de día, pero adicionalmente contiene ingredientes exclusivos para promover la renovación celular. Mientras dormimos, la piel se regenera, y al usar la crema correcta, estimulamos ese proceso. Si quieres despertar con la piel radiante, revitalizada e hidratada no renuncies nunca al uso de una crema nocturna adecuada a las condiciones y necesidades de tu piel.
8. HAZTE UNA LIMPIEZA FACIAL PROFUNDA REGULARMENTE. Más allá de la rutina diaria, la piel requiere una limpieza profunda cada 15 días o una vez al mes, según tus necesidades, que permita remover las células muertas de forma controlada, además de la aplicación de mascarillas nutritivas para regenerar la piel del rostro. Una estupenda opción es visitar las cabinas de belleza de Perfumerías Magie, donde puedes programar un facial con tus productos favoritos.
9. NO OLVIDES EL RESTO DE LA PIEL. Este año ponte como propósito no solo enfocarte en el rostro sino también en el resto de tu piel, ¡es el órgano más grande de tu cuerpo, no puedes descuidarlo! Comienza por aplicar a diario, después de la ducha, una crema humectante en todo el cuerpo, haciendo énfasis en cuello, codos, rodillas, pies y manos. Además, una vez a la semana, cepilla suavemente la piel en seco y luego aplica un exfoliante para suavizar y energizar la piel en un solo paso. Si lo deseas, puedes sellar la humedad con un aceite hidratante que aportará un glow envidiable.
10. ORGANIZA TUS PRODUCTOS DE BELLEZA & MAKE UP. Revisa bien todos los productos en tu tocador. Fíjate bien en las cremas y tratamientos, si ha pasado demasiado tiempo desde que se abrieron la primera vez, podría cambiar su textura, disminuir sus beneficios e incluso provocar efectos secundarios. Todos los frascos incluyen en sus etiquetas el tiempo de expiración, (la encuentras en una figura de un tarro con un número y la letra M. Por ejemplo, 6M significa que tiene una duración de seis meses una vez abierto), si ya pasó ese tiempo, deséchalos. Lo mismo aplica para el maquillaje.
11. LAVA TUS BROCHAS. Para proteger tu piel de acné, hongos o alergias, y matar cualquier bacteria que se pueda alojar entre tus brochas de maquillaje, los dermatólogos recomiendan lavarlas cada 7 a 10 días con agua tibia con un poco de shampoo o jabón especial. Lávalas bien, remueve el exceso de agua con una toalla de papel y déjalas secar al aire libre de forma horizontal.
12. CUIDA TU PIEL, DE ADENTRO HACIA AFUERA. Entre los secretos de esas pieles radiantes y hermosas que tanto admiramos están, además de los mejores tratamientos, hábitos como dormir no menos de siete horas cada noche; mantenerte hidratada consumiendo de 8 a 10 vasos de agua a diario; comer sano, con abundancia de vegetales, frutas y fibra y mantener a raya el estrés. Implementar hábitos saludables se traduce en una piel sana y bella.
